Quiero matar a mi jefe
Ficha
- Titulo original: Horrible bosses
- Dirección: Seth Gordon
- Género: Comedia
- Protagonistas: Jason Bateman - Charlie Day - Jason Sudeikis
- País: Estados Unidos Año: 2011
- Duracion: 1h38'
- Elenco: Jennifer Aniston - Colin Farrell - Kevin Spacey - Jamie Foxx
- Sitio oficial IMBD
- Disponible en:
- Tipo: Película
Ficha
Resumen
Nick (Jason Bateman), Kurt (Jason Sudeikis) y Dale (Charlie Day) son tres amigos hartos de soportar el maltrato y el acoso de sus respectivos jefes (Kevin Spacey, Colin Farrell, Jennifer Aniston), a quienes consideran seres humanos verdaderamente horripilantes y culpables de todas sus desgracias. Por eso, siguiendo los dudosos consejos de un ex convicto (Jamie Foxx), deciden conspirar para deshacerce de cada uno de sus jefes definitivamente.
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Trailer
Comentario de Cartelera.com.uy
En pocas palabras...: La broma más o menos funciona siempre que uno no espere una obra maestra de la comedia (no lo es) ni una ácida crítica sobre las relaciones laborales en el mundo corporativo de hoy (tampoco es el caso).
Crímenes (im)perfectos
La referencia es explícita y la comentan los protagonistas de la película, confundiendo la versión original (Extraños en un tren o Pacto siniestro, de Alfred Hitchcock, basada en una novela de Patricia Highsmith) con la versión libre que dirigió Danny DeVito en 1987 (Tira a mamá del tren). La diferencia es que, en este caso, no se trata de dos extraños que se conocen casualmente a bordo de un tren y acuerdan intercambiar asesinatos para no despertar sospechas, sino de tres amigos muy cercanos que deciden conspirar para matar a sus respectivos y odiosos jefes. Lo más gracioso no es la referencia en sí misma (aunque también), sino que las confundan entre sí y eso genere una pequeña discusión entre amigos que se van fácilmente por las ramas, como suele sucedernos a todos en reuniones con amigos... excepto que aquí sucede cuando se está planificando un triple asesinato.
Esto es algo así como una constante que se reitera a lo largo de un guión (de Michael Markowitz, John Francis Daley y Jonathan Goldstein) cuya premisa ya es lo suficientemente absurda (no por improbable, hay que decirlo) como para tomársela en serio. Y esto conviene aclararlo porque ya he leído algunas quejas de mujeres que no toleran que el acoso sexual de un superior (para el caso de la película, el de una superiora sobre un empleado del sexo masculino) sea tomado para la broma. Es cierto: el acoso sexual es un problema serio y debe ser tratado como tal... ¡pero no en el ámbito de una comedia delirante! Yo diría más: la película se permite tomarlo para la broma precisamente porque se trata de una mujer (nada menos que Jennifer Aniston, además) acosando a un varón; si hubiese sido al revés sí habría rebasado el límite de lo políticamente correcto, aún dentro de una comedia que se inscribe en el tipo de humor más bien machista (o mejor dicho, "para hombres", que no es lo mismo) de otras como ¿Qué pasó ayer? o Pase libre, de los hermanos Farrelly.
Lo cierto es que la broma más o menos funciona siempre que uno no espere una obra maestra de la comedia (no lo es) ni una ácida crítica sobre las relaciones laborales en el mundo corporativo de hoy (tampoco es el caso). Más bien se trata de una versión extendida de lo que podría ser el episodio de una sitcom norteamericana, terreno del cual de hecho provienen los tres protagonistas: Jason Bateman se hizo conocido por la serie Arrested Development (2003-2006) antes de sus roles secundarios en películas como Juno (2007), Hancock (2008) o Amor sin escalas (2009); Jason Sudeikis pasó por esa verdadera escuela de comediantes que es Saturday Night Live y por varios episodios de 30 Rock antes de ser el co-protagonista de Pase libre (2011) junto a Owen Wilson; y Charlie Day - un neoyorquino virtualmente desconocido para el gran público - llamó la atención en uno de los roles protagónicos de It's Always Sunny in Philadelphia (2005-2010), un personaje bastante parecido al Dale de Quiero matar a mi jefe.
El director Seth Gordon hizo un notable documental llamado The King of Kong (2007), sobre la rivalidad entre dos competidores por el récord mundial de un videojuego, antes de dirigir algunos episodios de Parks and Recreation, Modern Family y The Office, entre otras sitcoms. Algunos momentos de esta película recuerdan precisamente al tipo de humor que manejan esos antecedentes, especialmente The Office. Cada uno de los superiores retratados magníficamente por Kevin Spacey y Colin Farrell (este último sometido a un notorio cambio de imagen) luce como una versión bastante más extrema del impresentable jefe de esa serie, encarnado por Ricky Gervais en la versión original británica y por Steve Carell en la remake estadounidense. Lo de Aniston es un caso aparte: su dentista es una verdadera psicópata sexual bastante alejada de su habitual imagen de inocente heroína romántica, construida a su vez sobre su personaje de Rachel en la serie Friends.
Sin llegar a la inteligente y catártica irreverencia de Enredos de oficina (1999), estupenda comedia de Mike Judge sobre la opresión del mundo laboral y la necesidad de rebelarse contra el sistema (jefes incluidos), Horrible bosses se disfruta como un efectivo chiste de hora y media, no necesariamente transgresor pero sí divertido. Sobre todo para quienes alguna vez padecimos los excesos y/o abusos de alguna jefa o jefe y fantaseamos secretamente o en compañía de colegas, a la hora del almuerzo, con la mejor manera de deshacernos de ellos...
Por Enrique Buchichio para Cartelera.com.uy